lunes, 18 de marzo de 2013

Mudanza de cohecho


No pretendo empaquetar mis experiencias
por jugar a ser mayor
y perder por falta de destreza.

No busco empaquetar mis recuerdos
ni las ausencias.
Por predicar de una madurez,
cuando había lagunas en mi mente
de pura inconsciencia.

No quiero empaquetar mis ilusiones
por querer gritarle al sol
mientras estoy bebiendo una copa de chardonnay
con las estrellas.

No pienso renunciar a mis irreverencias,
por ver al mundo consumirse
en su propia mierda.

Probablemente me taches de todo,
menos de ser una mujer cuerda.

Pero (re)cuerda...

Lo importante en esta vida
no es formar parte de lo
ya estipulado y terminar siendo
ese ser de buen provecho,
carente de acción
Una película muda sin amor, sexo,
ni tan si quiera la lujuria de unos besos.

Sino...
Ser un miembro mas de este lugar
un tanto absurdo y caminar y dar vueltas
parar
mirarle
y reconocerlo,
un instante y saber...
que lo importante no es ser
alguien responsable,
sino esa chica,
 a la que conoces por casualidad
y se vuelve en ese alguien
puramente indispensable.

lunes, 18 de febrero de 2013

Déspota

Putas congojas en la madruga,
me oprimen el pecho y
me embargan de culpabilidades externas.

Que a la vez fueron las mismas
que me hicieron deseada.

Me niego a librar por tí
esta última batalla.

Que me lleven los demonios
lejos de tu madriguera,
y que se termine esta
puta migraña,
que me tiene en vela
cada madrugada.

Apología o algo similar

Sencillo es ver
el sonido que
desprende el brillo
de las hojas que,
       en
    Primavera,
de inmortalidad perenne
se congelan.

Como la llama
de una rosa
que se apaga;
Tal y como este verso,
ambiguo, que nunca falla.

Un sentimiento cíclico
inaugura la bienvenida
de una ausencia.

Allí donde estalla
la desincronía
del continuo giro
de ese viejo tio-vivo.
Y finalmente,
se instaura
un nuevo silencio
y todo se acaba.

miércoles, 6 de febrero de 2013

Uno y cero... hacen diez

Esencia de mala praxis
el no saber embrutecer
a mi ego.
Me jode el poema
el tener que hablar sobre
sexo, amor o miedos.
Para indagar sobre
el sosiego de la trascripción
de emotivos versos.

Quiero trasmitir el alma
sin tener que evocar
a dulces o amargos recuerdos,
y mimetizar a cada persona
con la llema de mis dedos.
Pero como no se hacerlo,
intento verbalizarlo
en vez de vencerlo.

Así que sucumbo
y me entrego a las paranoias
de estar rodeada de silencios.
De esta manera
oigo el eco de  mis pensamientos
cada día un poco las lejos.